FUTHARK, FUTHORC y UTHARK.
Imagen 1. Sabiduría antigua. Tomado de http://www.facebook.com |
Antecedentes
Según
Céspedes (2009), durante las épocas de cobre y bronce, “las runas hacían
referencia principalmente a un significado oculto y gnóstico, y estás eran
usadas con fines mágicos, rituales y adivinatorios.” (Céspedes, 2009, p. 12).
Se dice que “el momento histórico en la creación de las runas es análogo al mito teutónico de la creación de la vida” (Donald, 1994), en el cual:
Dos corrientes culturales, una del norte y otra del
sur, coincidieron y se mezclaron. De su encuentro las runas crecieron al igual
que un árbol. Con el tiempo, de la primitiva planta se desprendieron semillas,
y otros árboles —léase otros alfabetos rúnicos— echaron raíces en diversas
tierras. La corriente del norte, padre de las runas, era sobrenatural. Siglos
antes del nacimiento de Cristo, las tribus germánicas habían usado símbolos
como ayuda para la magia. Algunos de estos símbolos se han conservado en tallas
hechas en roca, cuyo nombre técnico es hallristingar.
(Donald, 1994).
Este momento pudo llegar cuando mercenarios germanos luchando en el norte de Italia, asimilaron algo de la civilización etrusca (Donald,1994). En efecto, tiene sentido pensar que el sacerdote germano se sintiera atraído por los símbolos que encontrara, puesto que son claves pata mejorar su propia magia. Hacerlo aumenta el alcance de su dominio de los elementos y el ascendiente sobre la Naturaleza y sus semejantes. De esta manera, pasar de 16 símbolos a 24, 33 o más, no es algo difícil de imaginar.
Es
importante considerar que “para las
sociedades cazadoras el hecho de poseer una lengua escrita tendría poco sentido
y por ello las runas se emplearon principalmente como pictogramas cargados de
asociaciones mágicas.” (Donald, 1994). Es más, puede que los más cultos
hayan estado informados de las opciones fonéticas de las runas, y así ésta
pudiera ser la explicación de porqué “muchos
de los vestigios rúnicos descubiertos formen palabras ininteligibles” (Donald,
1994).
Modelos de Futhark
Se presentan 14 modelos de ordenamiento de las runas, según diversas tradiciones y folclor. Cabe destacar que no existe un orden correcto.
1. Futhark antiguo.
2. Latín arcaico.
3. Runas góticas.
4. Futhorc anglosajón frisiano.
5. Runas Marcománicas.
6.
Nuevo Futhark Escandinavo (Young Futhark).
7.
Futhark
Danés (líneas largas).
8.
Futhark
Noruego (líneas largas).
9.
Runas
Rök.
10.
Runas
Hälsinge.
11.
Runas
medievales.
12.
Runas
Dalecarlian.
13.
Futhark
Armanen.
14.
Uthark.
1. Futhark antiguo
El Futhark antiguo de
24 runas tuvo su apogeo hasta finales del siglo VIII d.c. Céspedes (2009) señala
que desde hacía tres siglos antes comenzaron a derivar otros dos sistemas desde
el antiguo: El Nuevo Futhark de 16 runas (también llamado Futhark Escandinavo o
Nórdico) y el Futhorc Anglosajón de 33 runas (también llamado Frisiano).
Imagen 2. Futhark antiguo. Tomado de Céspedes (2009). |
2. Latín arcaico
Entre los académicos
se establece un origen latino de las runas. Al punto en el que se debate si
acaso proviene directamente del Latín o de estructuras idiomáticas anteriores,
como el Raético. En Céspedes (2009, pág. 25) encontramos la siguiente
explicación:
Se hablaba de una posible descendencia del griego por parte del contacto de los godos con el imperio Bizantino, sin embargo se han encontrado inscripciones en la ciénaga de Vimose que son del siglo II d.c. (año 160 aprox.) en las que se encuentra la palabra Harja (guerrero en lengua proto-germana), lo cual sería contradictorio con ésta teoría ya se conoce que los godos iniciaron su contacto con los griegos a partir del siglo III d.c.. Curiosamente el alfabeto gótico derivado del griego en el siglo IV sí incorporó dos letras derivadas de las runas Jera y Uruz pertenecientes al Futhark.
Más adelante, el mismo
Céspedes (2009, pág. 25) complementa el argumento, diciendo que:
Se han encontrado inscripciones rúnicas
del siglo I d.C. en el norte de Italia: la denominada como “el casco de Negau” está
escrita en lenguaje etrusco del norte y contiene un nombre de raíz germánica:
Hariagastiz. Por otro lado, la inscripción de Meldorf del año 50 d.C. parece
reflejar la escritura de palabras latinas por parte de personas
indo-germánicas. La punta de lanza de Novel del año 200 d.C. muestra una mezcla
rúnica entre gótico y viejo itálico. En el antiguo Futhark las runas
equivalentes a las letras F, A, G, I, T, M. L son consideradas iguales a las
del viejo itálico. Estas mismas runas también corresponderían a las letras del
latín F, A X, I, T, M, L. Las runas U, R, K, H, S, B, O corresponden a las
letras V, R, C, H, S, B, O. En cuanto a las demás runas sus orígenes son
inciertos, algunas de ellas son calificadas por ciertos investigadores como
aportaciones originales germánicas, mientras otros las refieren como oscuras
derivaciones del latín: TH, N, W, J, derivan de las latinas D, Q, P, G. En las
runas P, E, N su derivación de alguna lengua itálica aún es más incierta (Las
letras Y y Z fueron introducidas en Roma por Augusto).
Imagen 3. Latín arcaico. Tomado de Céspedes (2009). |
3. Runas góticas
Representan una variación del Futhark Antiguo, que se conoce como “Futhark Gótico”, dado que “se relaciona al lenguaje rúnico usado por los godos germánicos del este hasta el siglo IV d.c. cuando fue reemplazado por el conocido idioma gótico basado en el alfabeto griego.” (Céspedes, 2009).
Imagen 4. Runas góticas. Tomado de Céspedes (2009). |
4. Futhorc anglosajón frisiano
Es un sistema derivado
del Futhark Antiguo, pudiendo contener entre 26 y 33 runas y se comenzó a
utilizar desde el siglo V d. C. Céspedes (2009) nos dice que:
Estuvo relacionado fonéticamente en su
primera etapa a los lenguajes del antiguo inglés y antiguo frisio. Sobre su
origen se discuten dos teorías: la primera señala que fue desarrollado en forma
original en Frisia y de allí fue esparcido más tarde a Inglaterra. La otra teoría
indica que el Futhark original usado en Escandinavia fue llevado a Inglaterra,
allí la serie de 24 runas fue modificada para formar el Futhorc Anglosajón, y
finalmente este último sistema fue exportado a Frisia.
Se han hallado alrededor de 200 artefactos con inscripciones de este sistema rúnico.
Imagen 5. Futhorc anglo-sajón frisiano. Tomado de Céspedes (2009). |
5. Runas Marcománicas
En la Bavaria Carolingia (siglos VIII d.C. y IX d.C.) se desarrolló un
lenguaje hibridado entre el Futhark Antiguo y el Futhorc Anglosajón. Céspedes (2009)
dice que:
Imagen 6. Runas marcománicas. Tomado de Céspedes (2009). |
6. Nuevo Futhark Escandinavo
Se le vincula al cambio desde el dialecto proto-nórdico al nórdico
antiguo, el cual, paradójicamente, tenía mayor cantidad de fonemas. Su uso se
fecha en el año 800 d. C. Céspedes (2009) señala que:
No se acostumbraba a escribir la misma
runa dos veces seguidas por lo que se perdió la distinción entre la
pronunciación corta o larga de vocales. En la edad media este sistema rúnico
fue muy usado en Escandinavia y en los diferentes asentamientos de los Vikingos
de los cuales hay evidencias que usaron éste sistema rúnico desde el siglo IX
d.c.
Del periodo de migraciones de las tribus
germánicas por toda Europa (siglo III d.c al IX d.c) se han encontrado unos 350
artefactos con manuscritos en Futhark Antiguo, este sistema en aquella época
era conocido y usado sólo por una elite instruida. El Nuevo futhark por el
contrario fue enseñado para la mayoría de la población ya asentada en
Escandinavia. De éste sistema rúnico se han encontrado unas 6.000 inscripciones
en piedra y en la Europa central continental fue conocido como el “lenguaje de
los hombres nórdicos” por lo cual fue estudiado por sabios y líderes de dichos
países para mantener los contactos diplomáticos y comerciales.
Imagen
7.Futhark Nuevo Escandinavo. Tomado de Céspedes
(2009). |
7. Futhark Danés (líneas largas)
Del Nuevo Futhark fueron derivados otros
lenguajes rúnicos. De ellos, el más conocido y original es el Nuevo Futhark de
Líneas Largas, usado para inscripciones en piedra tanto en la región danesa
como en la noruega.
Céspedes (2009) indica que otra variación importante
fue la del Nuevo Futhark de Líneas Cortas – rök runes - (sueco y noruego),
empleado para uso diario e inscripciones oficiales en madera. Su característica
era que en este sistema se simplificaban las líneas de nueve runas del Nuevo
Futhark sueco y noruego, mientras que las otras siete runas se escribían de
idéntica manera.
Imagen
8. Futhark Danés (líneas largas). Tomado de Céspedes (2009). |
8. Futhark Noruego (líneas largas)
Imagen 9. Futhark Noruego (líneas largas). Tomado de Céspedes (2009). |
9. Runas Rök
Imagen
10. Runas Rök. Tomado de Céspedes (2009). |
10. Runas Hälsinge
Una variación del Futhark Nuevo es el sistema de Hälsinge
Runes o Staveless Runes,
que según Céspedes (2009), fueron halladas por primera vez en la
región de Hälsingland, en Suecia. Estas runas eliminan las líneas verticales.
Fueron usadas entre los siglos X d.C. y XII d.C.
Imagen 11. Runas Hälsinge. Tomado de Céspedes (2009). |
11. Runas medievales
Se trata de un sistema
de runas que incorporó nuevos símbolos para las vocales y consonantes mudas.
Céspedes (2009) afirma que “algunas letras
como S, C y Z eran intercambiables en la escritura con una misma runa”.
Han sido halladas más
de 600 inscripciones en madera, a la par que el latín, por lo que se presume
que estas runas fueron utilizadas como letras.
Imagen 12. Runas Medievales. Tomado de Céspedes (2009). |
12. Runas Dalecarlian
Es una derivación de
las runas medievales, y por consiguiente, una adaptación del Nuevo Futhark.
Según Céspedes (2009) :
Se produjo en la provincia de Dalarna en
Suecia y era en realidad una mezcla de runas con letras latinas. Su utilización
comenzó en el siglo XVI d. C. y mantuvo cierto uso hasta el siglo XX d. C.
Los caracteres de las Dalecarlian runes
son similares a los del lenguaje del sueco moderno y se han encontrado
alrededor de 200 artefactos con inscripciones de éste lenguaje rúnico en piezas
de madera, muebles y recipientes.
Imagen 13. Runas Dalecarlian. Tomado de Céspedes (2009). |
13. Futhark Armanen
El ocultista Guido von
List afirmaba haber descifrado el código oculto en las estrofas o Stanzas 138 a
165 del canto Hávamal del Edda poético, Céspedes (2009).
Concretamente, las estrofas
147 a 165 hacen referencia a 18 cantos de sabiduría. Estas estrofas, según List,
corresponderían exactamente a las 18 runas del sistema Armanen que él acababa
de re-descubrir, Céspedes (2009).
La palabra Armanen
hace referencia a lo que en forma latinizada Tácito en su libro Germania
describe como los Hermiones (Irminones) de las tribus “bárbaras” del
norte, es decir a los sacerdotes-magos iniciados en los misterios de las runas
los cuales tenían poderes mágicos y guiaban los destinos de su pueblo, Céspedes
(2009).
Imagen 14. Futhark Armanen. Tomado de Céspedes (2009). |
14. Uthark
Un escritor sueco, llamado Sigurd Agrell, propuso en
la década de 1.930 que “verdadera serie
rúnica conocida sólo por los mayores iniciados tomaba la consecución de 24
runas del Futhark Antiguo, pero desplazando la primera runa Fehu hasta la
última posición” (Céspedes, 2009).
Este cambio altera la interpretación de las runas,
puesto que la segunda runa del Futhark Antiguo, “Uruz”, pasa a ser la primera
del alfabeto. Por lo tanto, ya no es más un Futhark, sino un Uthark. Las implicancias
numéricas y simbólicas son profundas.
Imagen 15. Uthark. Tomado de Céspedes (2009). |
Sabiduría del Futhark
Imagen 16. Odín, y su inclusión en el Havamal. Tomado de https://threadreaderapp.com/thread/1301353718110130177.html |
Referencias
bibliográficas
Donald, T. 1994. “Las runas y su magia (magia rúnica)”. 1ª ed. Madrid. I.S.B.N.:8487476090.